¿Quien dijo que sería fácil? ¿Quien dijo que las cosas nos vendrían regaladas, que el trabajo vendría solo y que la vida sería un paseo?

Todos sabemos que la vida tiene altibajos y son esos momentos bajos los que nos hacen sufrir; pero a su vez, sabemos que esas etapas son las que nos empujan a sacar y recomponer lo mejor de nosotros mismos, para volver aun con más fuerza.

No hay soluciones rápidas.

Las cosas no vienen cuando queremos, pero si cultivamos la perseverancia y la paciencia, nuestra siembra, florecerá.

¿Te ha gustado? ¡Comparte!